NACE BLAS PASCAL (19 JUNIO 1623)

      El día 19 junio del año 1623 nace el que sería un gran científico, matemático, teólogo y filósofo francés. Se le considera el padre de las computadoras. Durante toda su vida de salud delicada, falleció a los 39 años en París el 19 de agosto de 1662.
       Un niño prodigio, educado por su padre, empezó trabajando en ciencias naturales y aplicadas y mostró tanto entusiasmo por estos saberes que a los once años escribió un tratado sobre los sonidos de los cuerpos en vibración. Su padre, preocupado de que ello le impidiera aprender las humanidades (especialmente el latín y el griego), le prohibió seguir, hasta que un día lo encontró escribiendo con un trozo de carbón en la pared una demostración de alta matemática. A partir de ese momento ya le dejó continuar sus inclinaciones.
      Se le reconoce como el iniciador de las computadoras. El origen de su interés fue consecuencia del nombramiento de su padre como encargado del cobro de impuestos. En 1642, en un intento de ayudarle en esta tarea, que implicaba continuos y extenuantes cálculos, Pascal (que todavía no había cumplido diecinueve años) inventó y construyó la llamada “Pascalina”, una máquina de funcionamiento mecánico precursora de las calculadoras de hoy que era capaz de sumar y de restar. Después siguió añadiendo mejoras al diseño y construyó cincuenta máquinas a lo largo de la década siguiente.
      Tras esos primeros trabajos científicos, la vida de Pascal se puede dividir en dos períodos. Dedicó su esfuerzo y su tiempo a la Matemática y a la Física, a las que incorporó teorías y descubrimientos del más alto nivel hasta el punto de que su nombre figura como denominación de la unidad de medida de presión. Experimentó y teorizó sobre el vacío y en el campo de la matemática, junto al llamado “triángulo de Pascal” su contribución más influyente fue la teoría de la probabilidad.
      Todo ello hasta la llamada conversión religiosa, en 1654, que, sin abandonar del todo sus estudios y trabajos, le llevó a dedicarse a la filosofía y la teología. Dos experiencias milagrosas (un accidente, que hoy llamaríamos de tráfico, en el que estuvo a punto de morir y la curación milagrosa de una sobrina) y el acercamiento a una doctrina religiosa, el jansenismo, modificaron sus intereses y sus preocupaciones. De esta segunda época son sus dos obras más conocidas las “Cartas Provinciales” y los “Pensamientos”.
      La primera es un conjunto de 18 cartas en las que un supuesto parisino escribe a un amigo de provincias exponiendo sus teorías de defensa del Jansenismo, un movimiento considerado herético que propugnaba una vuelta a la vida ascética y rigurosa y se posicionaba sobre las discusiones de la época, que eran fundamentalmente religiosas con debates sobre la salvación del hombre y la gracia de Dios. Las Cartas fueron prohibidas, condenadas y hasta quemadas pero ello no impidió que todos los eruditos de Francia las leyeran, e incluso el propio Papa que, a la vez que se oponía públicamente a ellos, fue persuadido por algunos argumentos de Pascal. Voltaire, por ejemplo, dijo que eran "el libro mejor escrito que ha aparecido hasta la fecha en Francia”. Y, según cuenta la historia, cuando a Bossuet le preguntaron qué libro le habría gustado escribir que no hubiese escrito él mismo contestó precisamente este.
      Sin embargo el libro realmente popular y conocido son “Los pensamientos”, del que se han hecho multitud de ediciones. En realidad más que un tratado de contendido organizado son las notas que había ido tomando para redactar después una “Apología de la Religión Cristiana” que nunca llegó a escribir. Por ese motivo algunos comentaristas opinan que es un texto desgajado, sin conexión interna y falto de coherencia intrínseca.
      De hecho nunca se ha sabido el origen de su delicada salud y el motivo por el que desde muy joven sufrió continuos dolores de cabeza que le causaron muchos problemas.