Catedrático y político español, Julián Besteiro había nacido en Madrid el 21 de septiembre de 1870 y murió en la cárcel de Carmona, viejo y enfermo, de una septicemia. Había sido condenado a treinta años de prisión por un tribunal militar en la posguerra.
Julián Besteiro fue el dirigente republicano de mayor rango que cayó en poder de Franco al término de la Guerra Civil. Habiendo podido exiliarse en más de una ocasión con los nombramientos que le propusieron como el de embajador, prefirió quedarse en España con los suyos, con los obreros. Antes había intentado una paz negociada con Franco que no dio ningún resultado porque éste exigió rendimiento total.
Julián Besteiro fue catedrático de Lógica y Filosofía en la Universidad Central de Madrid y, al tiempo, militante del PSOE y de la UGT, en los que siempre representó la opción más amable y más moderada, lo que nunca contradijo sus convicciones morales e ideológicas. De su estilo ético y personal valga de ejemplo que, habiendo sido elegido presidente de las Cortes Constituyentes de la II República, llevó sus deliberaciones con una neutralidad y una elegancia tan exquisita y trato tan afable que le valió un homenaje por parte de toda la prensa acreditada en la cámara.
