Pronunciado ante unas doscientas
cincuenta mil personas desde las escalinatas del monumento al presidente
Abraham Lincoln, está considerado como uno de los discursos más importantes de
la historia moderna y marcó el momento decisivo en el Movimiento por los Derechos
Civiles en los Estados Unidos.
Tras hacer referencia a la “Proclamación de la Emancipación” (declaración
realizada hacía justamente un siglo por el presidente Abraham Lincoln,
anunciando que todos los esclavos de los Estados Confederados de América serían
liberados), M. Lutero empieza reconociendo cómo todavía existía la segregación
a pesar de lo que ese y otros documentos históricos de su país prometían y hace
hincapié en que precisamente era el momento para hacer el cambio: hasta cuatro
veces repite "ahora es el momento...". Con un lenguaje que se ha
descrito como poderoso y persuasivo, pide justicia y cambio, y afirma que es el
comienzo de la lucha pero descartando de manera firme la violencia como medio
para el entendimiento.
Describe el padecimiento de la raza negra en ese momento con ejemplos
contundentes (no poder parar en moteles, no poder votar, etc.), y les pide que
sigan luchando por sus ideales. El momento más emotivo es cuando describe -con
el famoso "Yo tengo un sueño"- el país que imagina para sus hijos:
uno en el que los chicos blancos y negros convivan sin ningún tipo de
prejuicio. Despide a los asistentes diciéndoles que vuelvan tranquilos a sus
lugares, que de algún modo el cambio iba a llegar. Y termina ampliando la
visión de una sociedad unida al hablar no sólo de razas que dejen de lado sus
diferencias, sino también de religiones.
Ampliamente aclamado como una pieza maestra de retórica, el discurso se
asemeja al estilo del sermón de un ministro religioso negro. Además de apelar a
los documentos constitucionales de los Estados Unidos, las alusiones a la
Biblia también son frecuentes: en referencia a la abolición de la esclavitud
anuncia que "llegó como un precioso amanecer para terminar una larga noche
de cautiverio." O la del profeta Isaías cuando dice: "sueño que algún
día los valles serán cumbres..."
Su formación religiosa le lleva a hablar de "hijos de Dios" y
de que "la gloria de Dios será revelada, y se unirá todo el género
humano". Da ánimo a su gente con el mensaje cristiano: “continúen
trabajando con la convicción de que el sufrimiento que no es merecido, es
emancipador" y cerrando el discurso con ""¡Libres al fin!
¡Libres al fin! Gracias a Dios omnipotente, ¡somos libres al fin!".
Como ya se refirió al conmemorar su
asesinato 4 de abril de 1968, Martín Lutero había nacido en Atlanta
(Estados Unidos) en 1929 y fue un pastor protestante, de raza negra, que dedicó su vida a luchar por los
afroamericanos a través del “Movimiento por los derechos civiles”, y que
participó en numerosas protestas tanto contra la guerra de Vietnam como contra
la pobreza en general.
Convertido en pastor baptista, en
1954 se hizo cargo de una iglesia en la ciudad de Montgomery, Alabama. Muy
pronto dio muestras de su carisma y de su firme decisión de luchar por la
defensa de los derechos civiles con métodos pacíficos, inspirándose en la
figura de Mahatma Gandhi y en la teoría de la desobediencia civil. Por esa actividad,
encaminada a terminar con la segregación y discriminación racial a través de
medios no violentos, recibió el Premio Nobel de la Paz en el año 1964.
Cuatro años después, en una época en
que su labor se había orientado especialmente hacia la oposición a la guerra y
la lucha contra la pobreza, fue asesinado en Memphis, cuando se preparaba para
liderar una manifestación.
King es recordado como uno de los
mayores líderes y héroes de los Estados Unidos. Se le concedió a título póstumo
la Medalla Presidencial de la Libertad, y la Medalla de oro del Congreso. Desde
1986 su día es festivo en los Estados Unidos.
En el ámbito religioso está reconocido como mártir por
dos iglesias cristianas, la episcopal y la luterana. Ambas tienen días festivos
dedicados a su memoria: el 4 de abril y el 15 de enero, respectivamente,
habiéndolo incorporado también a sus calendarios de santos.